¿Cómo impulso el compromiso de mi equipo?

Propósito nº1: Haré que mis colaboradores ahorren tiempo... Y yo también lo haré.

El tiempo es dinero, ¡y es también estrés cuando se lo pierde en transporte! A nivel mundial, el tiempo medio de trayecto es un poco menos de 40 minutos para llegar al trabajo (y lo mismo para el regreso al hogar). Esto equivale a un total de 300 horas por año, o a más del 10 % del tiempo de trabajo.

Por lo tanto, una buena política interna de viajes y transporte puede marcar una verdadera diferencia en el compromiso y la productividad de sus colaboradores. Esta comienza con la gestión total o parcial de los costes de transporte para los trayectos. Se trata de un beneficio muy apreciado, que puede reducir significativamente el presupuesto mensual de sus colaboradores.

Sin embargo, esto no impide, al mismo tiempo, que promueva el uso de la movilidad suave (caminata, bicicleta, etc.), por ejemplo, mediante el pago del costo de suscripción para un sistema de bicicletas compartidas.

Además, también puede simplificar los procedimientos de reembolso de los gastos, por ejemplo, con la aplicación Xpenditure de Sodexo. El ahorro de tiempo será beneficioso, tanto para colaboradores y gerentes, ¡como para usted mismo! Por otra parte, las nuevas tecnologías hacen posible que trabajar a distancia se vuelva más fácil.

Esta es una opción para tener seriamente en cuenta, ya que el 89 % de los gerentes de pymes han implementado soluciones para facilitar el equilibrio entre vida profesional y vida personal (incluyendo el teletrabajo, los horarios adaptados o los servicios de conserjería) se encontró un aumento en la productividad y la eficiencia de sus colaboradores[1].

Propósito nº2/ Le doy un pequeño impulso al presupuesto de mis colaboradores (sin sacrificar el mío)

La seguridad financiera es una problemática que representa un desafío cada vez mayor para los trabajadores, y las personas con estrés financiero dedican un promedio de 13 horas al mes para abordar estas cuestiones en el trabajo. Sin embargo, ciertas medidas particulares establecidas por el empleador pueden volverse fundamentales para revertir esta tendencia, convirtiéndose en verdaderas palancas de participación: tengamos en cuenta que tanto para el 54 % de los millennials estadounidenses, como para el 50 % de los trabajadores de la India [2], ¡el estrés financiero es simplemente una buena razón para cambiar de empleador!

Ahora bien, algunas soluciones pueden aliviar el presupuesto de sus colaboradores de manera tangible: vales de restaurante, vales de regalo para Navidad, vouchers de servicios para el cuidado de los niños.

Ya sea de manera colectiva o individual, de distribución periódica o según su desempeño, estos beneficios son universalmente apreciados (en el 91 % de los casos, los cupones, vales, bonos aumentan la productividad de los colaboradores)[3]. Educar y capacitar para llevar una buena gestión fiscal es otra buena manera de ayudar a sus colaboradores. P

or ejemplo, Sodexo Servicios de Beneficios e Incentivos de Sodexo ofrece soluciones para ayudar a sus colaboradores a administrar mejor su dinero, y fomentar el ahorro con un sistema de incentivos de hasta un 5 %. Se trata de un servicio que responde a una necesidad real, ya que sabemos que 47 % de los trabajadores estadounidenses[2] y hasta el 92 % de los colaboradores chilenos[4] tienen muy poca cultura financiera.

Propósito nº3/ Ayudo a mis colaboradores a cuidar su salud... y así contribuyo a la buena salud de mi empresa

Los costos de salud son una preocupación compartida por colaboradores de todo el mundo, especialmente en países que no gozan de sistemas de salud ventajosos. Para el 20 % de los trabajadores estadounidenses, los costos de salud son una fuente importante de estrés, mientras que el 84 % de los brasileños creen que un buen seguro médico es el beneficio nº 1 que un empleador puede ofrecer. Por lo tanto, una cobertura de salud eficiente...

¡Es clave en el compromiso de sus colaboradores!

Más allá del aspecto financiero, es evidente que la salud y el bienestar son condiciones indispensables para generar rendimiento. Además de un buen seguro de salud, los programas de bienestar orientados pueden ser muy eficaces: el coaching nutricional, la ayuda para dejar de fumar, los programas de bienestar y para estar en forma son buenas maneras de animar a sus colaboradores a tomar mejores decisiones en términos de alimentación y a adoptar estilos de vida más saludables.

Propósito nº4/ Escucharé a mis colaboradores (para aumentar la eficacia de mi estrategia de compromiso)

Un estudio realizado a nivel mundial muestra que el 40 % de los trabajadores piensa que los beneficios e incentivos que reciben no se adaptan a sus necesidades. Antes de crear un programa de beneficios e incentivos para su negocio, es importante definir una estrategia previa para ayudar a definir los factores palanca y asegurar su efectividad.

Para ello, el uso de los datos disponibles para la empresa, tanto interna como externamente (eficiencia de la red de transporte, disponibilidad y costo de servicios locales y de cuidado de niños, etc.) es esencial: en primer lugar, para evaluar las necesidades de manera objetiva, y, en segundo lugar, para elegir las respuestas más adecuadas. En principio, puede realizar una encuesta entre sus colaboradores y apoyarse en los datos internos para ajustar su estrategia a las prioridades organizativas de su empresa.

Estos análisis previos le permitirán asegurarse de que los beneficios e incentivos ofrecidos correspondan a las expectativas de sus colaboradores. Luego, puede estudiar los datos de elevación utilizando herramientas como la plataforma Inspirus, que le ayudará a gestionar fácilmente el despliegue y el acceso a los diversos beneficios y recopilar datos de uso que, con el tiempo, le permitirán refinar su programa.

Propósito nº5/ Les voy a brindar más oportunidades... para que hagan crecer mi empresa

Los beneficios financieros o en servicios no son las únicas palancas para generar compromiso. Cuando se trata particularmente de las nuevas generaciones Y y Z, el desarrollo personal y las expectativas de desarrollo profesional son tan fuertes, o incluso más fuertes, que un buen sueldo o un incentivo puntual. Un estudio reveló que para el 54 % de los millennials la posibilidad de evolución en su carrera encabeza su lista de criterios para elegir un empleador, muy por delante del salario (44 %).

Si los programas tradicionales de capacitación pueden ser complicados y costosos de implementar, hay alternativas más ágiles, pero igualmente eficaces: los MOOC (en línea) o programas de tutoría, por ejemplo, han demostrado ser eficaces y mucho menos difíciles de implementar.

Los conocimientos compartidos por sus propios expertos constituyen, además, una buena palanca de progreso: 90 % de los millennials dice que los “seniors” son una excelente fuente de aprendizaje en el lugar de trabajo. Por su parte, el coaching individual es a menudo más eficaz y mucho más gratificante para un colaborador que las sesiones de entrenamiento colectivo que no coinciden demasiado con sus expectativas y necesidades.